Thursday 14 August 2008

Rusia y demas

Mañana 6 de la mañana empezamos un trek de 10 dias por los Himalayas. En realidad 12, entre viajes y demas. Asi que desaparezco de aca por un tiempo.

Como detalle, hoy a la mañana soñe (o me levante creyendo haber soñado, lo cual viene a ser lo mismo para el caso) que uno de los 6 integrantes confirmados del grupo que armamos, uno de ellos en particular, no iba a venir. En el sueño las razones eran vagas, pero me quedo muy claro el recuerdo de que no podia venir. Cuestion que nos juntamos al mediodia a terminar de arreglar cosas y este muchahco israeli estaba ahi, cara palida, aduciendo diarrea violenta y abrazado a un plato de arroz blanco despojado de todo elemento de sabor. Pero seguia en pie, sostenia que venia, que no caia, que seguia confirmado. Un par de horas mas tarde (lo perdimos en algun camino), nos llega por noticias de otra persona que estaba en cama y que oficializaba su no-venida. A veces me dan miedo mis capacidades adivinatorias. Dentro de poco me quedo a vivir tirando el tarot.

Hablando de tirar el tarot. Lo relacione con un tio segundo del cual no tengo noticias hace alrededor de 10 años, que andaba de hippie por el mundo (se reporto por ultima vez por carta desde La Serena, Chile) y que, si mi mente no me engaña, vivia de tirar el tarot, entre otras cosas. Y minutos antes de que esa persona nos confirmara que el 6to integrante no estaba disponible para el trek, me encontraba absorto en mirar a un hombre --46 años (lo descubri luego, mis capacidades adivinatorias no son tan certeras... todavia...), hippie hasta la medula (el aroma lo delata), pelo blanco y mirada penetrante-- cuasi-destrozar en el ajedrez a un muchacho --kazako-ruso-israeli-canadiense (vivio varios años en todos esos lugares, y su padre es checo), parte de los integrantes del trek, con un parecido pertubadoramente similar a aquel otro muchacho desnutrido que presta el auto y termina con la negra enorme en la pelicula Roadtrip (para aquellos lectores cultos, avesados con tal canto al septimo arte ), prometo fotos-- en el ajedrez. Finalizada la masacre, me entere de que era argentino, exiliado a los 16 durante la dictadura, sin pisar Argentina hace 2 lustros, padre fallecido y madre sin noticias desde hace años, viajando por el mundo desde entonces, viviendo en innumerables paises de fabricar artesanias y otras actividades (u$s 200 por mes), con sobrinos en España e hija en Sao Paulo, un porro circular (no en forma pero si en esencia eterna de quemar y quemar y nunca consumirse) y un particular desagrado hacia los españoles, particularmente aquellos "...jovenes negativos..." que dicen mucho "me vale" y alguna otra expresion que me olvide. Interesante personaje. No conocia a mi tio.

Cuestion que hace unas 2 semanas que estamos en Leh. Intentando espiar las olimpiadas a traves de algun televisor clandestino, no-custodiado por la legion de activistas internacionales pro-Paz-Mundial (cada dia siento una molestia mas honda hacia el prototipo de activista politico) que luchan contra los chinos y cualquier señal televisiva que provenga de ellos, en pos de los derechos de libertad tibetanos. Ya dimos varios paseos por unos paisajes increibles, probamos todos los restaurantes de la zona (hay uno que hace comida tailandesa para caerse de culo), aprendimos la unica palabra en Ladakhi que conocemos (Shulé, que significa tanto Hola como Chau, como Gracias, como Por Favor; y es cierto, no es chiste), pasamos por un fin de semana de relax en una "casa de meditacion" con comida casera y mucha gente joven, entre los cuales reclutamos a estas otras 4 (3) personas que decidieron unirsenos mañana.

Y finalmente llegue, hace ya un tiempo, a Rusia. Nos quedamos en un departamento de unos amigos del tio de Sonia, en pleno centro moscovita, a 5 cuadras del Kremlin, con todas las comodidades aunque con algunos detalles innecesarios y ciertas combinaciones de colores que, aunque dignas, quizas, del gusto de epocas futuras, definitivamente esteticamente indignas del contemporaneo. En suma, un poco de vacaciones del caos y la mugre indios.

Moscu. Kremlin, Plaza Roja. Linda ciudad. Calles amplias (se dice que varias de ellas fueron ampliadas por Stalin para la pompa de los desfiles comunistas), heterogenea en gentes, moderna, trafico de locos y rusas con faldas de longitud negativa (como bien dijo mi amigo, Long, con quien cruzamos temporariamente caminos en el verano ruso: "Se ve que hay multa si la pollera va por debajo de la rodilla."). Una de las ciudades mas caras del mundo, desborda de gente despilfarrando plata (nuevos ricos denominados literalmente por los ruskys Novo Ruskii...), pero con una disparidad enorme, con los pensionados del ex-comunismo teniendo que vivir con mensualidades magras, dependiendo de sus familias o, en su defecto, de limosnas o venta callejera de cualquier producto que puedan procurar. Es particularmente triste ver al sinfin de Babushkas (abuelas), de ropajes sucios y esperanzas puestas en los proximos rublos que le permitan subsistir otro rato.

Y no puedo dejar de escribir un parrafo para la personalidad cultural, herencia comunista. No hay nada mas dificil que intentar que un ruso detras de cualquier mostrador intente mover siquiera 2 o 3 neuronas para, al menos, darte una minima mano para que te hagas entender. Ingles? Es eso acaso un idioma? Señas? No... demasiado esfuerzo, prefiero mirarte con cara de mal humor (actuada por supuesto), tirarte, a media-voz, un buen puñado de palabras en ruso para que te sientas bien incomodo, mover mi cuerpo con impaciencia y desagrado, y darte la espalda o ignorarte mientras atiendo a otros clientes que puedan comunicarse oralmente conmigo. Me lo dijo Sonia el primer dia, "Lo importante en Moscu es siempre actuar enojado por todo. Si el tren no viene, un par de gritos. Si alguien te choca por la calle, una buena mirada de odio y alguna palabra de desprecio. Y asi... Es como se vivia en el comunismo, si no peleas por tu lugar en la cola la gente te pasa por arriba..."

Igual, a pesar de la dificultad idiomatica y el caracter sovietico, la familia de Sonia me hizo sentir como en casa. Fuimos al sesenta-avo cumpleaños del padre, con vodka helado fluyendo como agua, algunos espectaculos para mantener alerta a los invitados (nuestro amigo Long fue protagonista de un duelo de besos con un indio, personaje, 4 cabezas mas chicas que el... terminaron bastante cariñosos diria yo...), comida que desbordaba por las mesas y una banda final de musica balcanica muy muy buena.

Y seguimos para San Petersburgo. Otra ciudad que vale la pena conocer. Completamente distinta a Moscu, mas europea en algun sentido arquitectonico y estetico, con el museo Hermitage que recorrimos hasta que los pies no dieron abasto y donde fuimos a ver "El Lago de los Cisnes" por el segundo-mejor ballet del mundo (vimos el primer acto desde el ultimo piso, llegamos tarde y las babushkas sovieticas casi nos sientan en un pupitre y nos dan una leccion de puntualidad, tras lo cual nos mandaron en penitencia a un rincon del fondo, no pudiendo ocupar nuestros asientos hasta el comienzo del segundo acto --de tres--). Y las noches blancas (o casi blancas, grises quizas...), que como la ciudad esta ubicada tan al norte, debido a fenomenos planetarios en los cuales no me voy a explayar, las horas de oscuridad son minimas, hasta inexistentes durante un par de semanas al año, durante el climax del verano. Mientras nosotros estuvimos ahi, solo oscurecia (aunque siempre quedaba un vestigio de claridad en el horizonte) durante 4 horas, por lo cual uno se encontraba de repente a las 11 de la noche caminando por la ciudad con gente por todos lados y una claridad de atardecer en el cielo que casi no daba lugar al hambre...

En fin. Ya basta de este eterno compendio de informaciones inconexas. Que pase por Rusia. Que estuvo muy bueno. Que volvi de Rusia. Que llegue a India. Que volamos a Leh. Que aca estamos. Que mañana nos vamos. Que me esperan unas porciones de pizza de muzzarella, champignones y cebolla y un jugo de manzana local 100% natural 100% helado que me obligan a terminar con esto.

La Paz este con Ustedes.

1 comment:

Seba said...

y viejo, ya volvieron?? que bien suenan las fiestas rusas!